Estos fueron formulados a principios de la década pasada, pero siguen siendo válidos en la actualidad.
Rebecca Blood fue una bloguera temprana y ansiosa. Publica menos en estos días, pero se ha convertido en una fuente establecida de las formas de regular la calidad abierta de Internet de hoy. Esta es una explicación ampliada de sus seis reglas, que son:
- Publique como hecho solo aquello que crea que es verdad.
- Si el material existe en línea, vincúlelo cuando lo referencia.
- Corrija públicamente cualquier desinformación.
- Escriba cada entrada como si no pudiera cambiarse; agregar a, pero no reescribir o eliminar, ninguna entrada.
- Divulgar cualquier conflicto de interés.
- Observe las fuentes cuestionables y sesgadas.